01/11/2022
Las personas que no se lavan los dientes tienen hasta un 65% más de probabilidades de demencia senil


La presencia del Covid-19 en la vida diaria ha evidenciado la necesidad de cuidar la salud mental. En la actualidad, hay una mayor conciencia social en cuanto a la necesidad de acudir a terapia y de tener una mente sana. Cada vez más estudios demuestran la relación entre la salud bucodental y la salud mental. En concreto, hay entre un 22 y un 65% de posibilidades de desarrollar complicaciones relacionadas con la demencia senil en aquellas personas que no se lavan los dientes, ya que las  bacterias que habitan en la boca terminan llegando al riego sanguíneo. Así lo indica una investigación reciente, publicada en la revista Journal of the American Geriatrics Society.

Hay entre un 22 y un 65% de posibilidades de desarrollar complicaciones relacionadas con la demencia senil en aquellas personas que no se lavan los dientes

«La investigación concluye, tras haber realizado un estudio durante 18 años a un grupo de 5.500 personas, que quienes habían tenido un mayor descuido por su boca, tenían mayor probabilidad de desarrollar complicaciones relacionadas con la demencia senil», explica el Dr. Jorge Ferrús, periodoncista, implantólogo y cofundador de la Clínica Dental Ferrus & Bratos de Madrid.

Relación bidireccional entre salud mental y salud oral
Por otro lado, las personas que tienen una continua sensación de tristeza o tienen depresión, suelen prestar una menor atención a su higiene. «La constante preocupación, no solo la que ha generado la propia pandemia, sino sus consecuencias (preocupación por la familia, el trabajo, la propagación del virus, etc.) ha hecho mella en la mente de muchas personas»,señala el Dr. Jorge Ferrús.

Una de las consecuencias ha afectado directamente a la boca. «Especialmente tras los meses de confinamiento, detectamos mayores problemas de caries, bruxismo y roturas de dientes debido a los nuevos hábitos adquiridos en casa. Esto ha hecho que problemas poco graves se hayan ido desarrollando hasta ser enfermedades que revisten mayor importancia. Aun así, en general la población está siendo consciente de que visitar al dentista con regularidad y abordar a tiempo sus problemas bucales es un aspecto fundamental para la salud», destaca el especialista.

Dr. Ferrús: «Tras los meses de confinamiento, detectamos mayores problemas de caries, bruxismo y roturas de dientes debido a los nuevos hábitos adquiridos en casa»

En segundo lugar, las preocupaciones derivadas de la pandemia y otros aspectos anteriormente mencionados han hecho que muchas personas experimenten un mayor nivel de estrés que perjudica la salud oral. «La intranquilidad constante se hace palpable en el estado de las encías, concretamente debido a la aparición de una enfermedad periodontal conocida como gingivitis ulcerosa necrosante aguda (GUNA). Aunque es habitual que afecte a personas jóvenes, hay otros factores de riesgo, como el tabaco, una alimentación deficiente o la falta de sueño reparador. La GUNA se traduce en el sangrado e inflamación de las encías», indica el doctor. Todo ello, unido al hecho de tener peor un estado anímico, contribuye a que se deje de lado la higiene oral diaria.

«La intranquilidad constante se hace palpable en el estado de las encías, concretamente debido a la aparición de gingivitis ulcerosa necrosante aguda»

Finalmente, el especialista resalta que la autoestima y la sonrisa están estrechamente relacionadas. «Es por ello que la autoestima y la sonrisa están estrechamente relacionadas. Cada día nos encontramos con personas que quieren mejorar el aspecto de sus dientes y corregir problemas como el apiñamiento, el color o la falta de brillo, algo que termina perjudicando la forma en la que se miran a ellos mismos y aumenta un complejo», concluye.